Unas Flores para ti

Una vez fue a cortar un Girasol, pero le conté que era para darte y me dijo, no soy digno de estar junto a ella, pero por qué dices eso, le refuté y me dijo, ves mi tallo es largo y fino, se asemejan a unas piernas, y tú me has contado que ella tiene las piernas largas muy bonitas, que son como columna de mármol talladas a pulso.

Entonces fui a ver una Rosa, y tampoco quiso ir, le dije que por qué y me dijo ella es muy noble y yo tengo espinas, no quiero que se lastime conmigo, así como tú no la quieres lastimar.

Y me fue a ver una Hortensia y tampoco quiso ir, y me contó que, como es toda púrpura, no quería opacar tus pensamientos de dulzura... y me dijo, mejor anda y róbate el néctar que tiene en sus labios y me lo traes, para yo también saborearlo.

Fui donde un Tulipán, y tampoco quiso ir, me dijo que ya estaba, que basta con el estado de amor que me tenía inmerso, para que quería llevarle donde ti, ya no tendría razón, bastaba estar drogado de ese amor puro.

Fui y le pedí a una Dalia que me acompañe, y se sonrojó mucho, y me dijo tus intenciones son buenas y lo sé, pero ella no me quiere junto a ella, anda y róbale un abrazo y tráeme su aroma para yo también soñar, en ella, así como tú sueñas.

Fui y hablé con un Lirio y me dijo, para que llevarme si el sol se pondrá celoso, él le acaricia en tu ausencia con sus amarillos rayos, ten cuidado que el sol te la quiere robar...  Sin embargo, pregúntale al clavel.

Fui donde el Clavel y él temeroso me dijo, sí, yo he visto, que el sol acaricia su piel y su caballera, y se te la va a robar para siempre, he visto como sopla y con su aliento acaricia su cabellera

Entonces escuché un “pist, pist” y era una Margarita que me decían tómame y arranca cada una de mis hojas y averigua si te quiere y salgamos de dudas, tómame me insistió y yo le dije, no quiero tomarte, a quien quiero tomar para mí, es a ella                       

Desperté y tú no estabas, el sol te alejo de mí para siempre...

Quiero ser...

Quiero ser ese ser que esta junto a ti
que me dejes saber de ti
no ser un satélite en tu vida
ser el pensamiento con el que despiertes
el aliento con el que te acuestes

Quiero ser ese pensamiento,
que al cruzarse por tu cabeza alborote tus hormonas
ese pensamiento que fui tiempo atrás
ese suspiro cómplice que  le diga a tu corazón
calma que ya viene

Quiero ser esa caricia que necesites,
ese susurro que escuches en tus sueños
ese calor que necesites junto a tí
ese no sé qué, para lo que sea
eso quiero ser

En mis sueños

En la soledad te siento

Caminas en mis pensamientos
Mi corazón presiente tu llegada

A mis sueños acaricias mi pelo

Trato de abrazarte, pero no puedo
Sonriente juegas conmigo

Una vez te tuve entre mis brazos

Llorando, te veía dormido
Sabía que no ibas a despertar

Ahora estas en el cielo

Lo sé, porque de ahí viniste
Y ahí regresaste pequeño amor